miércoles, 25 de marzo de 2009

Mi parte de la entrevista

Es decir, se trabaja o no, eso lo tenéis que ver vosotros en casa. Antes, los alumnos cuando se iban del instituto, después, por las tardes, se ponían a estudiar muchas horas o iban a clases particulares. Hoy eso prácticamente se ha perdido. La gente le da poca importancia a lo que está estudiando, es decir, tenéis una falta de curiosidad, de interés en general. Ya digo que en general: hay alumnos que no, hay cursos en los que existen gran interés. En fin, lo que ocurre es que nosotros, los que somos ya más viejos, vemos que el cambio ha sido mayor del que, realmente, creo yo que ha sido.

Alumnos que lo han tenido a usted como profesor lo califican como “ídolo” y “crack”. ¿Usted se calificaría igual?

Lo de crack no lo sé, pero ídolo tampoco. Me gusta la palabra, porque ídolo es como adorar a algo y no me gusta que me adoren, pero sí que me quieran. Eso sí, que me quieran y que yo quiera a los alumnos. Eso siempre lo he pretendido, les he ayudado siempre que he podido, con viajes, con la universidad, con montones de cosas..., y quererlos y que me quieran sí que me gusta, pero ídolo es una palabra que significa un poco de adoración, y eso no me gusta.

¿Qué viajes de fin de curso propone para los estudiantes que ya se gradúan en la ESO?

Yo siempre he tenido dos teorías. Cuando se hacen los viajes para cuarto de la E.S.O, normalmente nos hemos movido en el territorio nacional, es decir, a los Pirineos, Galicia o hacer un viaje cultural por la zona de Castilla, que es muy interesante. Y en los alumnos de bachillerato sí que me gusta siempre llevarlos fuera del país, porque el hecho de subirse en un avión, el hecho de hablar otro idioma pues siempre les provoca curiosidad. Y en cuarto yo no me atrevo a salir fuera, porque es muy complicado; pero hay en el territorio español montones de sitios preciosos y que no sea solamente irse a las playas o a las discotecas, sino que se pueda hacer un viaje muy interesante en la zona de Castilla, Galicia, Asturias... Eso vosotros lo decidís en muchos casos.

¿Cuántos viajes ha realizado durante estos años?¿Y cuál es el que más le ha gustado?

30 años, todos los años, un par de ellos, así que multiplica... A Mérida, a París, a Italia, a Portugal, a Túnez... La verdad es que uno de los que más me ha gustado fue un viaje a Italia con los alumnos, y el de Túnez. A Túnez viajamos hace dos años con los segundos de bachillerato: fue un viaje muy bonito. Primero, la gente fue que como no queriendo, no les gustaba; pero después cuando volvieron, todos hablaban maravillas de Túnez. Incluso hubo dos chicos que gracias a ese viaje, después, estudiaron filología islámica, así que fue uno de los que más me gustó.

¿Ha tenido que dar la cara por algunos de sus alumnos en algún viaje?

Más de una vez, dar la cara y poner cara de buenos amigos para que no les pase nada, pero sí, muchas veces.

¿Qué gustos musicales tiene?

Ya no sé cuáles, pero vamos sí, flamenco me gusta mucho y la música antigua del rock.

¿Qué libros recomendaría usted a los alumnos de la E.S.O?

Ahora mismo, así a bote pronto, pues yo un libro, más que un libro, recomendaría algunos autores, como Roald Dahl, que no sé si habéis leído algo de él, La fábrica de chocolate. Hay libros para alumnos de segundo, tercero, hay muchos libros juveniles: El guardián sobre el centeno. Hay algunos librillos que siempre he recomendado, pero yo podría haceros una lista buena.

¿Me podría contar alguna anécdota de cuando ha tenido que dar la cara por sus alumnos en algún viaje?

Un chaval se pasó, sin mala idea, pero lo pasó muy mal. Casi lo tuvimos que llevar al hospital, porque había bebido demasiado. Después en Mérida, en París también tuvimos muchos problemas con chicos, es decir, anécdotas hay muchas. Si vamos setenta por el sesenta por ciento o setenta por ciento van bien, pero siempre hay dos o tres que meten la pata. Incluso así los he defendido, y cuando hemos venido de esos viajes, siempre hemos dicho qué tal ha ido todo, pues muy bien, no ha pasado nada. Nunca les digo a los padres cosas malas, siempre intento decirles las cosas buenas de sus hijos.

Miguel, la entrevista ya está corregida. Súbela al sitio de El País de los estudiantes.

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